Cuido, limpio y doy esplendor

Y no soy la real academia de la lengua española. Pero coincidimos las dos en el lema

Mis fines de semana se pueden definir así. Aunque el último estuvo alterado por el partido de España contra Suecia ya que a las 6 de la tarde tenía que estar todo en calma para ver el partidito en familia.

La realidad es que a las 6 y algo de la tarde me desperté de una minisiesta de tumbona (me había quedado traspuesta, como decía mi tía Maria que en paz descanse). La selección estaba jugando sola. Con esto no quiero decir que Suecia no apareciera, quiero decir que no aparecieron mis hijos ni mi santo y yo estaba espabilándome el sueño.

Los críos en casa de mi hermana y mi santo a saber dios donde. ¿Así como vamos a ganar una Eurocopa si no estamos a lo que estamos?

Sigo con el lema. Que decía que los fines de semana son para limpiar. Y cuando llega el comienzo del verano es como si tuviera el síndrome del nido. El caso es que ese sábado me levanté con ganas de comerme el mundo... Vale, acotemos, con ganas de limpiar mi pequeño mundo y esa es una de las razones de que todos pusieran pies en polvorosa o tierra de por medio.

Otro de los cuidados de esta última semana fueron los resultados de los exámenes. El cuidado consiste en mediar entre padre e hijos. Hemos pasado por los pelos a 3º de la ESO y con soltura a 5º de EP. Durante el partido Turquia - Chequia mi santo le estaba leyendo la cartilla al de la ESO, que si no le hace caso, que si hay que estudiar más, que dejes de mirar el partido, que estamos hablando de cosas serias, QUE CANTADA LA DEL PORTERO ... sin palabras.

Y ahora viene el esplendor, el esplendor en la hierba, cuando aparezca bañador en ristre en la piscina. Este sábado se abren al público y no hay peor momento que ese, el primer minuto; cuando te quitas la ropa en público y aparecen las carnes blancas y fofas. Haces todo lo posible por no ir, porque sea el padre el que acompañe al niño a la piscina (esta vez voy a tener suerte, mañana voy a una quedada de blogueros). A las dos semanas ya te vas adaptando (antes, si tienes suerte de ver algún cuerpo en peores condiciones que el tuyo).

Y todo esto con una audición fin de curso de la Escuela Municipal de Música el lunes. Que la última vez que actué mi imagen pública quedó muy mermada. Entre unas cosas y otras cuesta levantar cabeza. Anda que si no fuera por animar al muchacho a que siga con la guitarra...

...que me voy pensando que poner en la porra familiar al España - Italia y tanteando la web de entradas, que no quiero perderme el España - Rusia de baloncesto en Cáceres el 20 de julio.

Publicado en "Extremadura 24 horas" el 21 de julio de 2008