... bien hecho.
Ni idea de la hora exacta, la noche antes retrasamos los relojes.
¿Retrasamos los relojes? eso será en las casas de bien, en la mía no se tocan y menos los que están colgados. Para más cachondeo unos tienen adelanto de 10 minutos, otros están retrasados 7, unos con hora de otoño - invierno y otros en la temporada primavera - verano.
El caso es que tenía que preparar un cocido. Los comensales podían ser desde 4 hasta 7 y ante la duda me decidí por hacer la garbanzá en el puchero grande. En la olla expres no cabían todas las verduras, legumbres, carne y caldo.
Cuando finalicé con el ritual en la cocina, me lancé al teléfono para ver si Fernando se quedaba a comer.
Ahora abrimos un paréntesis.
Fernando es un estupendo amigo que me encontré entre blogs. Me alegré un montón cuando me dijo que iba a realizar un curso o jornadas lúdico-formativas para gerentes de los centros de formación no reglada. La alegría era porque eligió Alcántara para tal fin. Un fin de semana completo de trabajo y turismo rural. Me sentía un poco responsable de que todos estuvieran a gusto, lo que viene a ser el síndrome de la madrina.

Foto: Fernando Valbuena
Por las caras se ve que muy a disgusto no estaban. El sábado por la tarde hicimos una visita guiada. No sólo saben de formación no reglada, localizaron un gazapo en el folleto explicativo de la localidad. Un dato sobre el comienzo de las guerras carlista, el folleto dice 1818 y mi wikipedia particular (Fernando) lo dató en 1833. Y sin despeinarse, se sabía el dato. Yo que apenas soy capaz de quedarme con la fecha de mi nacimiento. También me llevé una receta de tencas, las quise titular "Tencas a lo Paco" pero Paco me las escribió como "Tencas al laurel"
Cerramos el paréntesis.
Además de dedicarse a organizar eventos en mi pueblo, es directivo del Badajoz y jugaban a las 5 de la tarde, por lo que declinó mi invitación al cocido para poder estar en su palco a su hora. También porque ya iba caminito de casa.
Ya eramos 6.
Abrí el correo para ver si Raúl me había contestado. Efectivamente me había contestado:
"No voy a poder pasar por Alcántara. Hoy me intentaron robar el auto en Sevilla.
No robaron casi nada (solo el cargador del GPS) pero no podré salir de aquí hasta que lo arregle.
Después te cuento con mas detalle.
Besos y gracias a vos y a Paco"
¿Dónde aparcaría esta criatura? Aunque en Sevilla y con matrícula francesa, había muchas probabilidades de que esto ocurriera.
Un contratiempo para él, con la cantidad de problemas que da un robo, si encima eres forastero de fuera y con el tiempo tasao... Lo de menos era ya el cocido, el problema es que no iba a poder estar en Lisboa el día acordado. Están dando la vuelta al mundo curioseando edificios y construcciones (ciento y pico días de viaje) eso es formación y lo demás cuento ¿no?
Ya eramos 4
Podía haber pasado el cocido a la olla expres. Pero no se me ocurrió.
Podía haber asegurado los comensales antes de poner el perolo al fuego. Pero no se me ocurrió.
Podían haberse ablandado los garbanzos en el rato que cocieron. Pero no fue el caso.
Podía haber cerrado la boquita mi santo. Pero ...
Comimos temprano. Francisco tenía partido de fútbol a las 4 y no era cuestión de que llegara tarde. Había un margen de tiempo, no esperaba ser titular (es el más pequeño del equipo con diferencia).
Salió de titular. No quiero ni pensar como estaría esa digestión entre la garbanzá y los nervios.
Sigo con el tema. Mi santo (dice mi tutor del taller literario que tengo que olvidarme de Elvira Lindo y santo y demás gaitas). Sigo, mi santo tenía un disgusto del copón; su plato preferido no estaba a la altura de las circunstancias.
Para mí el problema hubiera sido si aparecen Fernando, Raúl y Graciela (la pareja de Raúl) pero si eramos los de casa... tampoco era tan grave que los garbanzos quedaran un poco tiesos.
En estas circunstancias suele soltar alguna frase grandilocuente tipo: "Para desgraciar un cocido así, mejor que no lo hagas"
Yo muy digna, miro y callo. Sé que se le pasa en un rato. Si se come dos platos... muy malos no tenían que estar.
Ataqué cuando se le pasó el cabreo y ... " Procura tener memoria, es el último que vas a comer preparado por mi" y le repito su frase "Para desgraciar ..."
En este punto ya me estaba pidiendo disculpas y ... "no serás capaz ¿verdad?" acompañado de miles de arrumacos y carantoñas y gracietas y...
A mí no, a los niños; pídele disculpas a los niños ...
... y reunió a los críos para decirles que se había pasao un poco con que no sé cocinar.