23.11.10

Escuela Municipal de Música de Alcántara



Abre blog. Por abreviar se le ha bautizado con EMMA, que además suena bien. Está en proceso de creación, aún así ya tiene algunos artículos. El de los aplausos está más que interesante, quedamos a la espera de saber qué comportamiento debemos tener cuando no nos gusta la actuación.

Queremos recopilar fotos y vídeos de los años anteriores (durante un tiempo seré co-administrador). Si alguien tiene, que se ponga en contacto con los profes o conmigo. Nota para Jesús Mesa "ni se te ocurra darle a los profes la grabación en la que aparezco ¿tocando? la guitarra española"

Se abre este espacio para compartir ilusiones, actividades, fotos, eventos, recordatorios, audiciones... y todo lo compartible en una escuela de música.

Dicho queda. ¡Ah! no pienso avisar que se cuelgan las actuaciones si salgo en ellas ¿estamos? De todas formas pongo un enlace a la derecha del blog (lo que viene siendo la sidebar) en la categoría de Alcántara.

7.11.10

Francisco


En nada actualizo con una cosina de Francisco.

Esto lo escribí ayer (creo). Ahora es hora de contarlo.

Francisco es mi hijo mayor. Bueno, todo lo mayor que se puede ser a los 16 años recienestrenados.

Cuando nació nos vimos los dos bastante inexpertos, aunque la única que era consciente de ello era yo. A veces me asustaba un poco su mirada, parecía que entendiera más de lo que se le supone a un bebé. Otras veces simplemente metía la pata intentando hacer lo mejor para su desarrollo.

Recuerdo haberle puesto en la cuna un móvil de esos que se cuelgan y dan vueltinas mientras dura la cuerda, creo que también sonaba una nana mientras había movimiento. Se lo compré apresuradamente al leer que esto hacía desarrollar nosequehostias. La realidad es que el muchacho estaba acojonao mirando eso sobre su cabeza y dejó de dormir con tranquilidad en la cuna. El siguiente paso fue quitar aquellas cuatro jirafas y encomendarme a dios para que el niño se desarrollara con normalidad, me pareció fundamental lo de dormir, no sé, prioritario a lo de desarrollarse nosequehostias.

Bueno, si tenía esas dudas y esos miedos cuando era chiquinino imaginen las que me presuponía que iba a tener cuando entrara en la adolescencia. Pero no, resulta que la cosa no es tan complicada, nos entendemos mucho mejor que cuando no me podía decir "Maaaaaaama, quita eso de la cuna que no puedo dormir".

Lo de la capacidad de hablar hace mucho, a pesar de que ahora no vocaliza (cosas de adolescentes, estoy segura que el problema de comunicación con ellos es que no entendemos lo que dicen ¿habrá que llevarlos al logopeda?)

Joe, me tengo que ir ahora y esto no lo he terminao, mierda de prisas.